lunes, 25 de febrero de 2008

Una vida, una casa

Así que allí estaba yo, con más de 65 años, en busca de mi primera casa. Recordaba cómo mi padre había hipotecado prácticamente toda su vida para comprar una casa. El me había dicho:
-Mira, yo pagaré una casa durante toda mi vida y cuando me muera tú te quedarás con esa casa y entonces durante toda tu vida pagarás otra casa y cuando tú te mueras dejarás esas casas a tu hijo. Entonces serán dos casas.
Luego tu hijo…
Todo el proceso me parecía terriblemente lento: una casa, muerte a muerte. Diez generaciones, diez casas. Luego bastaría una sola persona para perder todas esas casas en el juego, o para incendiarlas con una cerilla y echar a correr calle abajo con sus huevos en una cesta.
Ahora estaba buscando una casa que en realidad no quería e iba a escribir un guión que en realidad no quería escribir. Estaba empezando a perder el control y me daba cuenta de ello, pero parecía incapaz de dar marcha atrás.

Fragmento de: Hollywood (Charles Bukowski)

sábado, 9 de febrero de 2008

Es una bruja!!

¿Cómo podéis saber si es una bruja? En realidad, sólo hay una forma de descubrirlo. Cuando las brujas van a la hoguera, ¿qué les sucede?
¡Se queman, se queman! ¿Y qué otra cosa se quema también? ¡La madera! ¿Y qué ocurre con la madera? ... ¡Que flota, que flota en el agua! Muy bien.
¿Y qué otra cosa flota en el agua? ... ¡Un ganso! Perfecto. Entonces, para saber si es una bruja habrá que ver si pesa como un ganso. ¡A la balanza!