jueves, 8 de mayo de 2008

George Orwell tenía razón, después de todo

"Doblepensar significa el poder, la facultad de sostener dos opiniones contradictorias simultáneamente, dos creencias contrarias albergadas a la vez en la mente. El intelectual del Partido sabe en qué dirección han de ser alterados sus recuerdos; por tanto, sabe que está trucando la realidad; pero al mismo tiempo se satisface a sí mismo por medio del ejercicio del doblepensar en el sentido de que la realidad no queda violada. Este proceso ha de ser consciente, pues, si no, no se verificaría con la suficiente precisión, pero también tiene que ser inconsciente para que no deje un sentimiento de falsedad y, por tanto, de culpabilidad.
El doblepensar está arraigado en el corazón mismo del Ingsoc, ya que el acto esencial del Partido es el empleo del engaño consciente, conservando a la vez la firmeza de propósito que caracteriza a la auténtica honradez. Decir mentiras a la vez que se cree sinceramente en ellas, olvidar todo hecho que no convenga recordar, y luego, cuando vuelva a ser necesario, sacarlo del olvido sólo por el tiempo que convenga, negar la existencia de la realidad objetiva sin dejar ni por un momento de saber que existe esa realidad que se niega... todo esto es indispensable. Incluso para usar la palabra doblepensar es preciso emplear el doblepensar. Porque para usar la palabra se admite que se están haciendo trampas con la realidad. Mediante un nuevo acto de doblepensar se borra este conocimiento; y así indefinidamente, manteniéndose la mentira siempre unos pasos delante de la verdad.
En definitiva, gracias al doblepensar ha sido capaz el Partido —y seguirá siéndolo durante miles de años— de parar el curso de la Historia."

Fragmento del libro ficticio "Teoría y práctica del colectivismo oligárquico" de Emmanuel Goldstein.
(George Orwell - 1984)



1 comentario:

Junior Serrandez dijo...

"1984". Qué gran libro! Qué futuro (bueno... ahora pasado) tan sórdido e hipercontrolado! Qué manera de tergiversar la realidad hasta el punto que no sabes nada y de que alimenta el espíritu paranoico colectivo.
Si me aceptas una recomendación de ciencia ficción escrita te recomiendo un gran libro de Ray Bardbury: "Farenheit 451". Igualmente sórdido el futuro e hipervigilado, pero con un atisbo de esperanza.
Ah! Y la película que hizo el Truffaut en los 60 es una genial adaptación. Capta de manera perfecta el espíritu del libro. Para que vea yo una peli del Truffaut!!!
Oye... que esto quede entre nosotros. Que no se entere de esto el Asensi de que leo libros y veo películas de cineclub. Qyue yo tengo una reputación que mantener!